“La ciudad de la alegría”, una lección de humanismo

Esta nueva entrada está dirigida a los cinéfilos pero también a todas aquellas personas con una visión del mundo amplia y que les guste tomar conciencia sobre las desigualdades de nuestro planeta.

Os recomendamos un film precioso, de sensibilización, obligatoria para ser un poco más altruistas y para que se nos despierte a todos la chispa de la solidaridad y la estima a los elementos inmateriales.

 

El título ya invita a verla sin saber nada más sobre ella: “La ciudad de la alegría”, un film de Roland Joffé basado en una novela de Dominique Lapierre con el mismo título.

La película se centra en la historia de un cirujano norteamericano desilusionado (Patrick Swayze) que, tras perder a un paciente, viaja a la India en busca de paz espiritual. En Calcuta, tras ser golpeado y robado, es ayudado por un granjero (Om Puri) que le lleva a una clínica en la "Ciudad de la alegría", una de las zonas más pobres de Calcuta.  En medio de todo esto, Max aprenderá que a pesar de las inundaciones, desastres, penurias y enfermedades, la esperanza, el amor a los semejantes y la lucha por la justicia son razones suficientes para vivir con alegría.

Este film ha dejado huella en la historia del cine… y en el corazón de todos los espectadores que la han visto.  

Aprovechamos para hacer difusión de la ONG ciudad de laesperanza y alegría, una fundación que tiene como objetivo prioritario la pobreza y acción directa, con especial interés en la mujer y los niños, por ser ellos los pilares de la sociedad y del futuro.